Yo pensaba que al llegar iba a ver puras cosas feas , así como suciedad y cadáveres de basura en las calles y el mar. Que no iba a soportar el olor a contaminacion, entonces podría ser feliz, sacándole las fotos a esas cosas. Pensé que el día iba a terminar siendo eterno y aburrido, que me iba a desmayar de calor hasta que al fin nos fuéramos de Valparaiso. Pero no; llegue y me recibió con cerros todos lindos con palmeras y casas tratando de simular ser arboles entre las pendientes. Llegue, y el mar se encontraba gigante y abrasador, y lo peor; estaba limpio de cualquier cosa, no había nada de malo, hasta los barcos los sentí en su lugar, todo estaba en su ahí, perteneciendo, no había basura, ni los edificios ensuciaban el universo, vi agua , millones de moléculas de agua en el lugar donde pertenecían, no vi nada sucio, ni una sola gota mal gastada, hasta el frio no incomodaba, hasta las manchas de sol en mi espalda se hacen nada al recordar lo que se siente pensar que todo anda mal y notar que hay segundos en que no hay nada incorrecto. Lo malo sera la nota, pues de lo feo me iba a valer yo para sacar algo de este viaje, pero ya falta muy poco como para que me importe.